Firenze Ricama es una pequeña compañìa artesanal, a conducciòn familiar, fundada por mi madre en el 1928, cuando tenìa solo 18 años. Màs tarde, en el 1950, a la compañìa se sumò un socio que luego fue mi padre.

Mis padres, ya ochenteros, son todavìa parte activa de la compañìa, que yo dirijo junto a mi hermano Riccardo. Quien escribe se ocupa de la producciòn y distribuiciòn en Florencia y Santa Marherita Ligure, mi hermano dirije la compañìa de Pavia.

La peculiaridad de Firenze Ricama es la elaboraciòn del producto, que es la misma de siempre, y es generalmente efectuada por bordadoras que trabajan en casa, las cuales bordan las piezas cortadas y preparadas en el laboratorio de la compañìa. Cada noche antes de regresar a casa, cuando hago la distribuciòn y entrega de los trabajos, hago el mismo ritual, paso por donde las bordadoras, entro en sus casas que huelen a deliciosa comida y existe una buena convivencia, me siento en la mesa con ellas entre un plato de pasta y un vaso de vino – rigurosamente Chianti – hablamos de encajes, puntos, diseños y telas.

Es aquì, en estas casas que miran hacia el Rìo Arno, que las bordadoras crean los productos de Firenze Ricama. Y es siempre aquì que sus àbiles manos dan vida a trabajos que siendo fieles a la tradiciòn, logran sabiamente unir el antiguo conocimiento con diseños, lìneas y telas modernas, con la misma dedicaciòn y cuidado de casi un siglo atràs. Estas creaciones son el producto de un arte que solo se puede pasar de generaciòn en generaciòn, no se aprende en una escuela. Es un arte que se aprende en casa, delante de la chimenea, mientras se memorizan los versos de la Divina Comedia, para recitar en la clase al dìa siguiente.

Gentil cliente, no se sorprenda si encontrarà una pequeña mancha de salsa en una camisa de noche o una pijama: todo es parte del proceso de producciòn y si hemos retrasado la entrega, puede ser que una de las bordadoras estaba resfriada. Obviamente estoy bromeando! Las creaciones terminadas son rigurosamente controladas en la compañìa, luego planchadas y enviadas.

Considerando la naturaleza del producto che ofrecemos,  rogamos expliquen a sus clientes que nuestras manualidades no son creadas industrialmente en cadena de montaje, si no que son hechas completamente a mano, por manos capaces, que trabajan con viejas màquinas de coser y luego bordadas por manos ancianas, guiadas por ojos expertos. 

Son productos que tienen un sabor diferente, el sabor de Italia, de Toscana, del Rìo Arno, del Chianti y de las viejas cocinas, hùmedas y calentadas con leña.

 

Hacemos nuestro mejor esfuerzo para satisfacer las exigencias de nuestros clientes, siguiendo una tradiciòn que es y serà siempre algo màs que un trabajo, mucho màs que una camisa de noche o un calzòn.